LA TELEVISIÓN DE PAGO, UN GIGANTE QUE EVOLUCIONA

 Si nos metemos en la guía de programación de cualquier televisor, veremos canales clásicos como la 1, la 2, antena 3, etc., y otros no tan clásicos como DMAX o TRECE, cada uno de estos, en menor o menor grado, con una línea editorial u otra. Hasta aquí nada cambia respecto a la televisión de pago. Entonces, ¿Qué diferencias podemos constatar entre los canales de televisión en abierto y los de televisión de pago?

En 2012, Pablo Romero, entonces director de contenidos Canal Plus Yomvi, explicaba que, en el entonces Canal Plus (actual Movistar Plus) la parrilla de canales para niños estaba segmentada, es decir, no era solo un canal para todos los peques de la casa, sino que hay canales para niños de 0 a 2 años, canales para niños más mayores, etc. Y ¿a dónde nos lleva todo esto? Nos lleva a que muchas compañías audiovisuales han detectado nichos de mercado audiovisual*1 sin cubrir. 


Pablo Romero, antiguo director de contenidos de Canal Plus Yomvi


Esto se traduce en que, en la televisión de pago, ya no son solo empresas que producen o emiten contenidos de corte generalista para un país, o que producen contenidos para cierto sector de un país. Ahora son, en su mayoría, empresas multinacionales que operan en diversos países y que se dirigen a públicos muy específicos, incluso públicos con intereses muy determinados. 

Pongamos por ejemplo los canales de cine. En cualquier plataforma de televisión de pago (no confundir con plataformas de streaming, ya que no necesariamente son lo mismo) tenemos, en el apartado de cine, los canales TCM, Canal Hollywood y SUNDANCE TV. ¿Qué diferencia a estos canales? Que el primero emite solamente cine clásico norteamericano, el segundo emite solamente cine de los noventa y el tercero solamente emite cine de autor. Si echamos un vistazo al panorama social que hay en este país, podemos constatar que cada uno de estos canales podría tener un público objetivo distinto. Por poner un ejemplo, el cine de autor suele ser visto por personas con elevadas inquietudes intelectuales, sociales, políticas y artísticas, lo cuál no sería válido para Canal Hollywood, donde abundan propuestas con un carácter mucho más comercial. TCM, por otro lado, podría encajar hasta cierto punto con el primer segmento de población al que he hecho referencia, dado que, antaño, en el cine se hacía más énfasis en los diálogos y en la historia que en los efectos especiales y la tensión visual y sonora, pero con todo y con eso, hasta cierto punto podríamos hubicar su público objetivo en un segmento de población de edad madura, ya que emiten películas que ellos han podido ver y disfrutar en su niñez, adolescencia o juventud. 

Lo que he comentado en el párrafo anterior tiene también su aplicación en cuanto a los canales de deportes, inexistentes en España hasta que llegó Teledeporte hace más de veinte años (aunque sea este un canal abierto desde hace años). Existen multitud de canales de deporte en la televisión de pago, y creo decir algo obvio cuando digo que el más conocido es Eurosport. Pues bien, este último TAMPOCO se podría comparar con canales como Movistar Plus Golf o Garage TV, siendo este último un canal dedicado al motor, por no hablar de otro canal nuevo llamado "HORSE TV", un canal para apasionados de los caballos. 

En consecuencia, y como colofón a todo esto, podemos llevar a la conclusión de que, como se dijo en cierto anuncio del entonces Digital Plus, había una televisión que nos trataba a todos por igual. Por suerte, la televisión de pago no es así: trata a cada uno según sus preferencias, y hace del hecho de ver la televisión algo verdaderamente interesante, porque en los canales de televisión de pago no hay espacio para la telebasura. Es, en consecuencia, una televisión en la que caben las preferencias de un amplísimo abanico de personas. 

*1 En economía se le llama "nicho de mercado" a un grupo de personas que tiene necesidad de un producto pero que no tiene esa necesidad cubierta, es decir, a un grupo de ciudadanos que necesitan de un determinado producto que, sin embargo, aún no existe en ningún lugar o en el propio país. 

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